¿Sabéis de esas veces en las que se empieza algo con mucha ilusión y pensando siempre en lo precioso que va quedar una vez terminado, pero que una vez puesto en marcha el proceso todo son problemas y fallos? Pues en eso se ha convertido la casa donde se encuentra el saloncito: una obra sin fin.
Se suponía que solo eran unas manos de pintura, unos retoquitos en las paredes y dos días sin importancia de obras en el suelo. Al final ha sido más de una semana de obras (las cuales no han terminado), en las cuales, los obreros, me han despertado instintos asesinos muy poco propios de una dama; desgraciadamente mi familia tampoco ha ayudado mucho a que la remodelación terminase antes. Cambiaron de opinión sobre cada detalle unas… ¿Diez veces?
Eso termina con la paciencia de un santo; yo no soy una santa, imaginaros mi estado de nervios.
Incomunicada con el mundo por falta de internet y línea telefónica, con polvo que parece reproducirse en las esquinas, ruidos constantes y encerrada prácticamente en una habitación para no molestar a los trabajadores… Esa ha sido mi semana. Y por todo esto me ha sido imposible escribir ni una sola crítica, no he conseguido leer con tranquilidad ni un pequeño relato (que tendría que haber leído en un suspiro, ya que solo consta de 75 páginas) y de lo único que tenía ganas era de encerrarme en mi cuarto, meterme en la cama y dormir y dormir… Cosa que no era posible por los ruidos.
¿Os había comentado que odio las obras en casa?
Ahora me queda esperar al último obrero (que por el bien de su integridad física terminará en el plazo acordado y sin dar problemas) y una larga semana de limpieza por toda la casa. Y cuando termine con todo eso, espero poder organizar como es debido el saloncito; no me gusta tenerlo así de abandonado, se merece una buena atención.
Así que como no he leído ni la caja de los cereales, me veré obligada a echar mano de críticas atrasadas. Mis más sinceras disculpas.
Necesitaba des estresarme con alguien y así de paso os explico la razón de la poca actividad del saloncito y el porqué de no haberme pasado por vuestros blogs cada día.
Feliz día y un té con pasta para todos.
13 Terroncitos de azúcar:
Madre mía, qué horror, odio las obras (aunque una vez que limpias todo lo que te han ensuciado da gusto XD). Espero que, como dices, termine el último obrero en el plazo previsto sin dar mayor mal que el necesario y puedas volver a dedicarte tanto al blog como a tus cosillas ^_^
¡¡Muchos ánimos y paciencia!! Besukis!!
Yo siempre lo digo "La maldición del gitano: En obras te verás", y es que es un sinvivir.
Dama, tu acaba con tus obras que aquí te esperamos con los brazos abiertos
Un beso
Bea
Qué horror! Asegurate que hagan todo bien porque sino vas a tener que volver a llamarlos a ellos o a otros para que arreglen lo que no quedó bien.
Yo los sufrí y lo peor es que hicieron todo mal. Años después sigo encontrando cosas mal hechas.
No sé cómo serán los trabajadores en el rubro construcción pero acá son todos impuntuales. Podés estar contenta si llegan una hora tarde. Es muy habitual que te dejen plantada sin siquiera avisarte. No sé qué es lo que pasa! Es todo un misterio.
Mucha suerte! Comprate tapones para los oídos y tratá de disfrutar de la lectura para escaparte un poco de ese horror.
Besotes
Ánimos Teixo!, verás que bien queda cuando todo esté terminado, ahora ya queda poco y aunque sé por experiencia que en estos casos a veces te dan ganas de llorar y patalear... lo mejor es tomarselo con filosofía
Un beso
Ainnnsss de obras!!!
Los dioses te amparen! Bueno, ten paciencia. No te digo que respires hondo por todo ese polvo que tienes por casa.
Besotes
Tranquilidad y paciencia, Dama! No te queda otra. Mi padre es reformista y ya sabes lo que dicen: En casa del herrero...
Sé de lo que hablas. Las obras dan asco. Pero lo dicho. Paciencia. Que aquí te estaremos esperando.
Bueno, piensa que cuando acaben tendras tu casa arreglada y lista para su disfrute. Paciencia y como dice LadyMarian, controla lo que hacen que hay muchos pillos por ahi.
Suerte y que todo vaya bien.
besos.
Hola que tal. Soy anna del blog princesa y a traves de nuestra querida Angeles Ibirika he llegado a tu blog ¡precioso salon de te ! felicidades.
Te invito a pasarte por mi humilde blog, un lugar donde puedo expresar lo que siento hacia la literatura. Mi sueño ser escritora, la realidad es otra.
Invitada quedas eh, pasate cuando quieras y opinas sobre mis novelas y relatos.
Un saludo
Holaaaa Dama,
Tómate con calma lo que queda de obras. Piensa en lo bonito que va a quedar todo después. Si es posible ten a mano infusiones de tila o valeriana con pétalos de rosas...ayuda un poquito.
El blog tómalo con calma y sobre todo disfruta con lo que hagas. Lo más importante es el día a día que nos toca vivir...
Espero que entre los obreros haya alguno donde poder recrear la vista.
Abrazotes enormes!
Buen finde!
Gracias a todas chicas!
La verdad es que las cosas están quedando muy bonitas, de eso no tengo queja. Ahora queda esperar al último obrero, que no sé donde se mete ni cuando vendrá (al menos tengo entendido que terminará rápido). Luego a limpiar.
Y después de todo... a disfrutar de las mejoras!!
Lástima que no hubiera ningún obrero que alegrase la vista como mentabais alguna ^_^
Besitos, y espero poder ponerme por completo al día en poco tiempo.
Ánimo con las obras, te esperamos pronto de vuelta :)
Abrazo, Flor
Gracias Flor!! casi, casi, mi casa vuelve a ser la misma pero un poco más bonita ^_^
Besitos!
Si que había un obrero que alegrase la vista , la hucha que nos enseñaba todos los días jaaaaa.
Dama y yo (su madre) estamos hasta ese sitio. Bicos
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